Freddy Galvis se emplea día a día, incluso con horas extras de trabajo, en el Bright House Field, campo de entrenamiento de los Filis de Filadelfia, viendo consciente de que tendrá una oportunidad trascendental para definir su futuro como campocorto regular en las Grandes Ligas.
En una etapa de trasmisión para los Filis, en la que muchos peloteros jóvenes tendrán un voto de confianza, el paracorto venezolano tendrá que certificar su condición de titular, si desea ser uno de los consecuentes en la alineación del mánager Pete Mackanin a lo largo de la campaña.
“Si bien este no es mi segundo año aquí, sí será mi segunda temporada completa como campocorto y sé que mucha gente me va a evaluar. Será un reto muy importante dejarles saber que puedo mantenerme a este nivel por varios años”, indicó Galvis a Versión Final en la sede primaveral de los cuáqueros.
En lo que fue su cuarta zafra en las Mayores, Galvis disputó 151 encuentros como paracorto, dejando un promedio de bateo de .263 con siete vuelacercas y 50 remolcadas. Con el guante registró un índice de rendimiento defensivo de 7.1 el cuarto mejor de la Liga Nacional.
“Eso no es nada nuevo para mí, ya me han dado antes esta responsabilidad, por lo que no tengo que cambiar nada, simplemente debo mentalizarme en hacer mi juego y darle al equipo la oportunidad de ganar la mayor cantidad de partidos”, comentó el “Toco”.
“Más que un reto lo veo como una muestra de confianza de esta organización. Es una gran motivación tener esta oportunidad, no todos pueden ser shortstop titular en las Grandes Ligas”, precisó el falconiano.
Tarea pendiente
Galvis posee las cualidades defensivas para darle solvencia a la posición, e incluso, para optar a un Guante de Oro si logra mantenerse en el lineup en base a su aporte ofensivo.
“Estoy trabajando bastante en mi bateo, me ha costado mucho retomar el timimg de mi swing”, apuntó Galvis, quien toma sesiones extras antes y después de los juegos de pretemporada en la jaula de bateo. - Citación :
- “Me pasó factura un poco el no haber jugado en Venezuela, ya tenía cuatro años corridos con esa rutina de ver turnos aquí y en nuestra liga, creo que fueron muchos días sin béisbol. Ahora estoy trabajando el doble para recuperar poco a poco el ritmo que necesito con el bate”, puntualizó el jugador de las Águilas del Zulia.
“El punto de contacto no lo tengo, a veces que bateo la pelota muy al frente y otra veces la dejo llegar mucho, es algo que uno va encontrando con los juegos, espero tener todo a tono antes del inicio de la temporada”, añadió.
En su estadía en la Gran Carpa,
Galvis mantiene un average vitalicio de .241 y un porcentaje de embasado de .282, algo que él reconoce que debe mejorar. “Estoy consciente qué tipo de bateador soy y las funciones que tengo que cumplir, por lo que tengo que ajustar mi ofensiva a las necesidades del equipo”.
Buenos muchachos
Mostrando su don de liderazgo como shortstop, Galvis es un pelotero que puede sacarle provecho a las características de su equipo, el falconiano es parte del grupo de jóvenes que desean emerger como figura en la rejuvenecida organización de Filadelfia.
“Este es un club muy joven y todos tenemos muchas ganas de demostrar muchas cosas, hay poco que perder y mucho que ganar,
es una motivación para todos lograr establecernos en Grandes Ligas y sabemos que esta temporada puede servir de impulso”, puntualizó.
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